domingo, 3 de abril de 2016

EMILY KANE KNGWARREYE (1910-1996) / NO PUEDEN NEGARNOS NUETRO LUGAR

  •  Estas obras producto del quehacer de una artista aborigen australiana, KNGWARRAYE, que empezó a pintar a los ochenta años, nos dejan asombrados, por cuanto descabeza mitos contemporáneos y erige otros incatalogables.  
  •  Son fruto del conjuro y la creencia, de una dimensión milenaria, de una depuración que con los siglos ha venido encarnándose como un prodigio de raíces profundas.
  •  Así es como estas plasmaciones de recio vigor cromático tiene un alcance religioso, animista, por un lado, y, por otro, una materialización planetaria, cósmica, en la que se encierra todo un acervo cultural y sincrético. 
¡Qué me importa el juicio final! Mi razón no me abandona nunca, como os he dicho antes para engañarnos.
(Los Cantos de Maldoror)

No hay comentarios:

Publicar un comentario