- El catalán JARDÍ es el primer desconcertado al término de su obra y contemplarla. En su proceso de ejecución son sus ojos los que toman la determinación y el sentido de dirección. Cuando ya deciden el final, es su mirada la que se sorprende y se perturba.
- Si bien sus referencias parecen apuntar a un marco pictórico concreto, el desarrollo gravita sobre escenas insólitas en la que la imaginación se cuela entre la soledad, la fantasía, el subconsciente y el desamparo.
- La armonía cromática se ha acompasado en el diseño de esa figuración que tiene en el hombre el objeto de una reflexión, que progresivamente se va internando en un misterio que plasma sin desentrañarlo. Configurando así un imaginario plástico versado en el transcurrir de vida y tiempo.
afina su sombra.
(Jeannette L. Clariond)
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