- Balthus no se equivocaba al decir que "el dibujo es una escuela estupenda de verdad y exigencia en un trabajo más austero, más místico quizá". En él residen las indagaciones múltiples de dentro, cuyo misterio turbador intenta desvelar el lápiz.
- Por eso el alemán Janssen es una "rara avis" que no se somete a ningún dictado excepto al suyo. Su magnetismo está en la línea, el trazado, las zonas sombreadas, la casi ceguera de esos ojos, las disímiles facciones conjuntadas, ese primer plano que nos permite intercalar la mirada y tratar de apurar el significado. Una obra inapreciable.
(María Zambrano?
La mirada introspectiva de h. Jansen es constante y cambiante. Cambia cuando lo externo lo afecta pero. Siempre se refiere a su yo, que
ResponderEliminarMaltrecho por el paso del tiempo y sus efectos le resultan desastrosos, amenazantes y recurrente en sus estados de animo