domingo, 12 de noviembre de 2017

PABLO ECHAURREN (1951) / SE ME VAN DE LAS MANOS


  •  Es cierto que la forma produce placer por su apertura a la imbricación múltiple de la obra, por su polisemia o simplemente porque supone una articulación y expresión de un imaginario plástico que nos sirve para fraguar un paradigma. 


  •  En esta especie de caleidoscopio de sumas y series cromáticas, el italiano ECHAURREN formula un código de relaciones entre significante y significado en el que uno y otro forman un registro máximo de velocidad y precisión. Se buscan como pedazos y se encuentran como microbios.  


  •  Parecen querer salirse de su jaula, escapar para roer o devorar lo que se les ponga por delante con el fin de que puedan culminar una completa metamorfosis. Así que no son inofensivos ni cuando la mirada deje de posarse en ellos. 

Me voy perdiendo hasta hallarme vivo.
(Fernando Pessoa)

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