martes, 23 de febrero de 2016

FELICE CASORATI (1883-1963) / TENDRÍAMOS QUE HUIR

  •  Nunca hemos de perder de vista el sentido plástico clásico, renacentista, tradicional, o como quiera llamársele, porque todavía nos sigue descubriendo elementos que los modernos y contemporáneos pueden utilizar y por lo menos partir de ellos para desarrollar un proyecto del presente.  
  •  La pintura del italiano CASORATI bebe en esas fuentes y prescinde de todo lo que considera accidental, su creación va directa al sentimiento, la soledad y la desdicha, a ese simbolismo que se conceptuó como una desafortunada visión ligada a la decadencia y al declive. 
 Pero esos tintes claroscuros provienen de un artista convencido de que la defección que le prometían no iba con él ni con su manera de entender el arte, el cual debía ser siempre un conjunto total que nunca tendría fin.
Entre los árboles y las barreras,
Entre los muros y las mandíbulas,
Entre ese inmenso pájaro que tiembla
Y la colina que lo abruma,
El espacio tiene la forma de mis miradas.
(Paul Eluard).

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